sábado, 22 de junio de 2013

Obama: mentiras, fraude y decepción



Nou Treball/Rebelión


Cuando Barack Obama inició su presidencia, en 2009, buena parte de la población norteamericana pensó que llegaban tiempos nuevos para su país. No era para menos: el primer presidente negro, elegido en medio de una oleada de entusiasmo popular, prometía cambiar el país, acabar con el nefasto legado de su predecesor, e iniciar una nueva política exterior que pusiese fin a las sangrientas aventuras de Bush. Más de cuatro años después, las esperanza suscitadas por Obama se han revelado ilusorias. Tras haber incumplido la mayoría de sus compromisos durante su primer mandato, en este primer año del segundo, Washington ha presentado a los nuevos colaboradores del presidente norteamericano como la prueba de que Obama está dispuesto a dar un vigoroso giro a la política exterior: Susan Rice, nombrada consejera de Seguridad Nacional; y Samantha Power, como embajadora en la ONU, son la nueva referencia; de quienes la Casa Blanca resaltó su trayectoria como defensoras de los derechos humanos. Sin olvidar el nombramiento de John Kerry como sustituto de Hillary Clinton en el Departamento de Estado, de quien se destacó su lejana oposición a la guerra de Vietnam, y el de Chuck Hagel, responsable del Pentágono, que fue presentado como un severo crítico a la guerra de Iraq. Sin embargo, tanto Power como Rice insistieron en la conveniencia de que Washington se implicase en la agresión a Libia, y nada indica que Kerry y Hagel vayan a defender una política exterior de su país basada en la colaboración, en la negociación para resolver los conflictos, y en la renuncia al uso de la fuerza. Al contrario: Estados Unidos ya prepara su nueva intervención en Siria, aunque sea por actores interpuestos, escaldados como están por los fracasos en Iraq y Afganistán, y deseosos de una retirada parcial de Oriente Medio para centrarse en Asia y la cuenca del Pacífico, donde China consolida su crecimiento.
No hay motivos para el optimismo. Más de cuatro años después, Estados Unidos se ha convertido en un Estado policial, con los ciudadanos vigilados y controlados por decisión de su gobierno, en cualquier lugar del mundo, a través de un programa clandestino, PRISM, organizado por la Agencia Nacional de Seguridad, NSA. Fue creado en 2007, bajo Bush, pero Obama ha mantenido ese y otros programas de espionaje, e incluso ha aumentado los recursos y las iniciativas para extender sus tentáculos por todo el mundo. Como hiciera Bush con la excusa del combate al terrorismo, Obama aprueba que los organismos de espionaje norteamericanos controlen correos electrónicos, lugares visitados en Internet por los ciudadanos, llamadas telefónicas, conversaciones en redes sociales, cuentas de correo, tráfico de pagos con tarjetas de crédito, archivos y datos almacenados, lugares desde donde se envían mensajes o se contacta con otra persona, de tal forma que las más mínimas acciones de un ciudadano son vigiladas por un poder antidemocrático (porque no tiene derecho a ese espionaje feroz) que escapa a todo control. Eso está siendo la presidencia de Obama.
Todo lo que supuestamente criticaba Obama cuando era candidato a la Casa Blanca, ha sido mantenido, e incluso aumentado, durante su mandato, hasta el punto de que el programa de espionaje norteamericano es el más ambicioso que jamás ha sido impulsado en el mundo. Aquella transparencia, legitimidad, esperanza, todo el conjunto de bellas palabras que Obama transmitió al mundo; el énfasis en los derechos humanos, la limitación o incluso renuncia al uso de la fuerza, y la opción por unas relaciones internacionales basadas en la cooperación con las otras grandes potencias (sobre todo, China y Rusia) y no en la agresividad y en las intervenciones militares, se ha revelado como una completa impostura moral, sin que sirvan de excusa las “limitaciones del poder”.
El dilema entre la seguridad y la libertad ha sido utilizado por el gobierno de Obama para construir un verdadero estado policial. Mientras Estados Unidos se presenta, con consumada hipocresía, como el defensor de la libertad en el mundo, y planifica gigantescas campañas de acoso político a China por el supuesto espionaje electrónico impulsado por Pekín… el mundo comprueba ahora que es el gobierno de Washington quien mantiene desde hace años un masivo robo de información, quien espía desde hace años a China y otros países, quien realiza ataques y sabotajes informáticos, quien roba información privada, militar, industrial y diplomática.
En su política exterior, también Obama ofrece al mundo mentira tras mentira. Presentado por la diplomacia de su país, y por gran parte de los medios de comunicación internacionales, como el presidente que iba a crear una nueva arquitectura internacional gracias a una política exterior que rompería con los usos de Bush, admirado incluso por la izquierda moderada europea, lo cierto es que ha mantenido en lo esencial el agresivo despliegue norteamericano en el mundo, sin cerrar las guerras de Iraq y Afganistán, dirigiendo su programa de asesinatos desde los drones en distintos países asiáticos y africanos, aumentando incluso la presión sobre China en Asia, desarrollando el sistema antimisiles dirigido contra Moscú, y, también, contra Pekín, diseñando un peligroso y aventurero programa de pruebas militares en las fronteras de Corea del Norte, y aceptando el programa de acoso contra Siria y Bachar al-Asad, que fue impulsado por países clientes como Arabia, Qatar e Israel.
Ahora, el sospechoso pretexto (utilización de armas químicas) dado para intervenir abiertamente en la guerra civil siria, recuerda también a las mentiras de Bush y Powell sobre las “armas de destrucción masiva” de Iraq, que nunca se encontraron. Además, Obama no ha conseguido ni el más mínimo avance para resolver la dramática situación del pueblo palestino, sometido a la ocupación, a la tortura, a la usurpación de su tierra, a la vida en las prisiones a cielo abierto en que Tel-Aviv ha convertido a Gaza y Cisjordania. Todas las promesas han sino vanas: Guantánamo, el programa de asesinatos selectivos en todo el mundo (que Obama supervisa y autoriza personalmente), el aumento de ataques con drones (superior a los años de Bush), la suerte del soldado Manning, y el acoso a Assange, las revelaciones del empleado de la CIA, Snowden, y los programas contra China y Rusia, dan fe del fraude.
Aun aceptando los matices y las diferencias con Bush, aun considerando las batallas internas que siempre se han mantenido en el gobierno norteamericano, lo cierto es que Obama no ha supuesto un cambio en la ambición estadounidense y en su obsesiva persecución del predominio mundial. Dick Cheney, Donald Rumsfeld y Colin Powell han quedado ligados para siempre a la criminal acción del gobierno Bush, pero Obama no ha traído nuevos tiempos. Ahora lo sabemos: la locura enunciada en 1984, la novela de Orwell, tantas veces presentada como una feroz denuncia de los sistemas socialistas, anunciaba, en realidad, el mundo del capitalismo contemporáneo, la destrucción de los derechos cívicos, la indefensión absoluta de los ciudadanos ante el poder. Todo eso, y la militarización creciente de la política exterior norteamericana, no augura unos tiempos distintos a los de Bush: los cambios de Obama se explican más por la pérdida de peso de la economía norteamericana, forzada también a los recortes del presupuesto militar, y a las consecuencias y fracasos cosechados en la agresiva década de Bush, junto a la reticencia de la población norteamericana a nuevas guerras de agresión, que a un nuevo espíritu. Los años de Obama están presididos por las mentiras, el fraude y la decepción.
Artículo traducido del original catalán: “Obama: mentides, frau i decepció”, publicado en Nou Treball.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.


Entrevista al actor Willy Toledo “He sufrido las consecuencias de la censura y la persecución política”



La Pupila insomne


Decenas de miles de españoles están saliendo de su país rumbo a América Latina en los últimos meses. Entre ellos no han faltado figuras del mundo cultural como Diego El Cigala que decidió irse a vivir a Playa Nueva Romana, acogido por la cadena hotelera Bahía Príncipe, que regenta el Grupo Piñero, en República Dominicana. El célebre músico dijo entonces que España “está pasando por un momento súper difícil” y que “se va al garete. ”Aquí hemos estado viviendo por encima de nuestras posibilidades durante mucho tiempo. Y ahora mismo el país está en hecatombe. Lo que más me duele es que personas como yo que hemos pagado carreras para que nuestros hijos estudien y tengan un porvenir… ¿Qué futuro les viene a mis hijos? Ninguno. La gente de 20 a 25 años no va a encontrar trabajo en 4 o 5 años y yo estoy trabajando para el gobierno y que luego vengan estos bandidos y se lo lleven”, argumentó El Cigala sin que eso le acarreara un solo juicio negativo en los medios de comunicación de la península ibérica.
En cambio, otra fue la reacción de la prensa española cuando hace unas semanas el conocido actor Willy Toledo informó a la cadena TeleSUR su decisión de fijar residencia en Cuba. A diferencia de lo sucedido con El Cigala, Toledo fue linchado por los medios españoles cual si se dirigiera a los mismísimos infiernos, a pesar de que en el Índice Desarrollo Humano -publicado por la ONU- Cuba adelanta a República Dominicana en 37 lugares.
A propósito de su llegada a esta Isla la pasada semana y sus motivaciones para hacerlo, sostuvimos este diálogo con Willy Toledo.
Iroel Sánchez: Se armó un gran revuelo semanas atrás cuando anunciaste que vendrías a vivir a Cuba. Ahora que ya estás en Cuba, ¿puedes explicar el por qué de esa decisión?
Willy Toledo: A pesar de lo que nos cuentan en los países capitalistas, en Europa fundamentalmente, que el único sistema posible y el menos malo, o el mejor de los sistemas posibles, es el sistema capitalista, la democracia parlamentaria capitalista, es obvio que existen otras maneras de vivir, otros sistemas políticos, otras maneras de relacionarse, otras maneras de resistir la avalancha que vivimos. Una de ellas es el sistema cubano, obviamente. Entonces, por un lado, mi necesidad como ser humano de experimentar, de vivir, de colaborar y participar de esa otra manera de hacer política, después de tantos años de admiración y defensa del pueblo cubano, con este otro sistema y esta otra forma de vida que supone la República de Cuba. Por otro lado, creo que ahora mismo las cosas están pasando en Latinoamérica, tanto en Cuba -donde llevan pasando ya 54 años- como en Venezuela, en Ecuador, Argentina… Tenía necesidad no sólo de estar en Cuba, sino de estar en la región para cualquier cosa que pueda pasar estar viviéndola en primera mano, para continuar mi defensa de este sistema desde dentro, y colaborar -en mi modestísima aportación- en el crecimiento y el fortalecimiento del socialismo cubano.
IS: Un lugar muy común en España cuando una persona con proyección pública defiende la Revolución cubana es preguntarle por qué no se va a vivir a Cuba. Tú estás viviendo ya aquí pero se ha dicho que tú no vienes a Cuba, sino que vienes en determinadas condiciones; se mostraron en algunos medios fotos de casas lujosas, con piscina… donde supuestamente tú vivirás en La Habana ¿En qué condiciones vivirás aquí, es en alguna de esas casas que se mostraron en los periódicos?
WT: Primero tengo que decir que tienen razón en una cosa, y es que me acusan de que en Cuba voy a vivir mejor que la mayoría de los cubanos. Es cierto, yo vivo mejor que la mayoría de los españoles en España y viviría mejor que la mayoría de los estadounidenses en los Estados Unidos de América. Yo nunca he pertenecido a la clase trabajadora, mi familia ha sido de la burguesía profesional, nunca me ha faltado comida, nunca me han faltado estudios, nunca me ha faltado vivienda, acceso a la cultura, etc…Nunca me ha faltado de nada. Entonces, por supuesto, yo he tenido la fortuna de tener un trabajo en el que se gana mucha plata y eso me ha dado, además de mi trayectoria familiar que ya me sitúa en una clase burguesa, mi profesión, que ha acentuado eso, incluso más. Entonces, sí, voy a vivir mejor que la mayoría de los cubanos pero no voy a pedir perdón por eso porque jamás he robado dinero a nadie y siempre me he ganado mi dinero de una manera absolutamente honrada. Pero hay algo que a esta gente les fastidia mucho y que no llegan a entender y es que alguien que venga de la burguesía y de una posición privilegiada o como mínimo bastante cómoda no esté de su lado. Ellos me exigen que por mi posición yo tengo que estar de su lado, no entienden que yo esté del lado de la clase trabajadora, del lado de los obreros, del lado de los que sufren, luchan y pelean por que todos los ciudadanos de este planeta podamos vivir en un sistema de justicia social con acceso a los medios de subsistencia básicos, a la salud, a la cultura, a la educación. Me consideran un desclasado, y yo estoy muy orgulloso de eso, de no haberme conformado con mis privilegios y de utilizar el tiempo y las posibilidades que he tenido para luchar porque otros puedan tener lo que yo he podido. Como tú dices, siempre me han dicho “si tanto te gusta Cuba por qué no te vas a vivir a Cuba”; bueno, ya estoy en Cuba… Yo me estoy imginando a los redactores jefes y a los esbirros de sus amos en las redacciones de los periódicos estrujándose el cerebro para ver cómo conseguían desacreditarme y la manera que han encontrado ha sido esa: publicar una foto de una mansión con piscina en la que supuestamente yo voy a vivir con mayordomos, con chofer… y con todos los privilegios que el estado cubano supuestamente da a los que le defienden… pues es radical y simplemente falso. No tendría ningún problema en trabajar para el gobierno cubano porque trabajar para el gobierno cubano, contrario de lo que supondría trabajar para el gobierno español, supone trabajar para el pueblo cubano. Miles de personas, muchos de estos que me critican en los medios de comunicación, trabajan para el gobierno español que supone trabajar para las empresas transnacionales, trabajar para los bancos, trabajar para el capitalismmo internacional, trabajar para todos aquellos que están hundiendo al continente europeo en la más absoluta de las miserias, concretamente en España, Portugal, Italia, Irlanda, Grecia, etc, etc. Entonces, dicho esto, he venido aquí a colaborar en lo que yo puedo aportar en mi ámbito profesional que es la cultura, el teatro, el cine, la televisión, en la medida de lo posible, por supuesto, a apoyar y colaborar con todas las causas justas por las que se trabaja en la República de Cuba, por la libertad de Los Cinco, por llevar la verdad del sistema político cubano más allá de las fronteras cubanas, por apoyar la Revolución Bolivariana. En fin, he venido aquí a participar, al igual que iban los brigadistas internacionales a apoyarnos a nosotros en los años treinta. Me considero un brigadista internacional que viene a Cuba a apoyar el socialismo cubano.
IS: Pero… ¿tú cubres tus gastos en Cuba, no los paga el gobierno cubano?
WT: Yo he pagado mi boleto, estoy pagando mi comida, mi manutención, cubro absolutamente todos mis gastos. Inicialmente estoy viviendo en casa de unos amigos que me han acogido generosamente, haciéndome un hueco en su casa, pero alquilaré un espacio para vivir de manera individual. No le pido nada al estado cubano ni el estado cubano me ha pedido a mi nunca nada. Voluntariamente me han acogido con los brazos abiertos, y voluntariamente tengo las manos abiertas y se las ofrezco al pueblo cubano para lo que me pueda necesitar.
IS: Tu posición solidaria con Cuba, también con el pueblo saharaui, que son las dos causas en las que más has militado, te han implicado una demonización, más que esta decisión de venir a vivir a Cuba que es lo más reciente de una cadena de demonizaciones ¿Qué consecuencias ha tenido eso para ti en términos de tu acceso a trabajos, o de tus posibilidades de realización como actor?
WT: Yo tengo constancia y la confirmación de que se me ha vetado para distintos trabajos en la televisión y en el cine. ¿Qué magnitud alcanza eso? No sabría decirlo, porque claro, además de estos casos que te cuento que tengo confirmados, yo nunca me enteraré de que hayan dicho “a Willy Toledo no le déis este trabajo”. Estoy convencido de que existe, igual que hay decenas, por no decir centenares, de presos políticos en mi país por el simple hecho de expresar sus opiniones, por el simple hecho de militar en la izquierda, en la izquierda revolucionaria fundamentalmente; ya sea en el País Vasco, en Madrid, en Andalucía, en Cataluña, donde sea… Hace poco fueron detenidos un grupo de anarquistas catalanes por expresar sus opiniones a través de Facebook; ese es el estado democrático en que nosotros estamos viviendo. Yo soy muy consciente, y he sido siempre muy consciente de las consecuencias que puede traerte la militancia en la izquierda o en la “extrema izquierda”, como ellos le llaman. Luego, si el Partido Socialista Obrero Español es la izquierda, yo soy la “exrema izquierda radical”, ¿no? Estoy muy orgulloso de serlo, siempre llevaré esa bandera, jamás la abandonaré. Lo tengo muy claro, y ellos lo tienen muy claro también, es lo que más les duele, han intentado pisotearme, han intentado que me retractara de muchas de mis palabras y nunca, jamás, lo han conseguido, y eso les duele y les fastidia. Por otro lado, quiero dejar claro una cosa: Yo me he venido aquí porque me ha dado la gana. Decir otra cosa sería una falta de respeto a los miles y miles, decenas de miles, de ciudadanos españoles, trabajadores, que han tenido que salir de su país por obligación, porque no tenían otra manera de ganarse la vida; no es mi caso, yo afortunadamente tengo una compañía de teatro que se llama Animalario con la que perfectamente podría subsistir sin ningún problema y por eso no quiero decir que yo soy un exiliado económico como lo son tantos; ni siquiera un exiliado político porque yo mantengo un pie en mi país, yo tengo el ojo bien puesto en España y cuando me puedan necesitar voy a estar allí. Cuando la cosa estalle, porque estallará, habrá una revuelta social, y habrá realmente una oposición frontal en las calles en contra de este gobierno criminal que está gobernando el estado español, seré el primero. Cuando se construyan las barricadas, yo estaré en las barricadas. De momento estoy aquí que es otra barricada también. Pero sí, he sufrido las consecuencias de la censura, he sufrido las consecuencias de la persecución política y he sufrido las consecuencias profesionales, sin ninguna duda. No pretendo ser un mártir en lo absoluto porque hay muchos otros que lo están sufriendo y lo han sufrido a lo largo de la historia, mucho más que yo, por decir la mitad de lo que yo digo en Colombia estaría probablemente muerto ahora mismo, en Honduras yo estaría muerto ahora mismo, y si yo no fuera un actor conocido probablemente estaría preso, en la cárcel en España; esa es la sensación que tengo, lo intentaron un par de veces pero creo que han calibrado que tenermme a mi en la cárcel no es su interés… de momento, porque hay muchos chavales y chavalas en la cárcel que no tendrían el impacto mediático que tuvieron las dos veces que me detuvieron a mi.
IS: ¿Puedes contar cuáles fueron las circunstancias de esas dos detenciones?
WT: La primera vez fue por entrar en el Congreso de los diputados donde se estaba debatiendo una moción de censura por los acontecimientos en el Sahara Occidental ocupado por Marruecos después del desalojo del campamento de Gdeim Izik donde hubo muchos muertos, niños, ancianos, mujeres, hombres; torturados, viviendas destrozadas, persecución política salvaje y brutal con el apoyo del gobierno español. Por primera vez en la historia de la “democracia” -siempre entre comillas esto de democracia española- un grupo de ciudadanos que entra en el parlamento español aprotestar es detenido y llevado a la comisaría, jamás había pasado y nunca ha vuelto a pasar aunque han vuelto a ocurrir otros incidentes dentro del parlamento; tengo la sensación de que iban a por mi para dar un escarmiento y un toque de atención, a los actores fundamentalmente, a los artistas que osan contradecir el discurso oficial obligatorio que impera en España, una llamada de atención de “esto es lo que os puede pasar”. La segunda vez fue por participar en una Huelga General, en un piquete, se me acusaba de unos incidentes que no habían sucedido; por supuesto, yo no había participado en ellos por el simple hecho de que no habían sucedido… pero me acusaban de haber entrado en un bar y destrozar el bar con un grupo de huelguistas, cosa que jamás sucedió; vino la policía a detenerme a mi casa, doce horas después de que se publicara en la prensa que me habían detenido, cosa que era falsa, pues doce horasdespués vinieron a mi domicilio a las doce y media de la noche, dos policiás de paisano a detenerme y estuve preso durante diecinueve horas. En ambos casos, afortunadamente, los jueces decidieron que no había caso y decidieron soltarnos. Pero en el caso de la Huelga General muchos compañeros y compañeras que fueron detenidos esa misma noche continuaron presos durante meses, en cárceles del estado español, del estado represivo español, donde todavía -según la Unión Europea, las Naciones Unidas, Amnistía Internacional, Human Rigths Watch y coordinadoras contra la tortura en España- todavía en el día de hoy -año 2013- se sigue torturando salvajemente a los detenidos en comisarías y cárceles, cosa que no ha sucedido jamás en Cuba. Nunca nadie ha podido demostrar un solo caso de tortura en Cuba. Sin embargo, nosotros somos una democracia y esto es una dictadura.
IS: ¿Tienes algún mensaje para los medios de comunicación españoles?
WT: Confirmar a los medios de desinformación del estado español, que son el 90% de los medios que existen en mi país, que sí, que estoy en Cuba, que sí defiendo la Revolución cubana, que no van a conseguir callarme, que no piensen que se han librado de mi. Que tengo un ojo puesto en mi país porque para eso es mi país, que tengo un ojo puesto en la clase trabajadora de mi país que está sufriendo las consecuencias brutales del neoliberalismo o capitalismo tradicional porque esto no ha cambiado un ápice por mucho que intenten cambiarlo de nombre, y que me van a tener allí, en primera fila, hoy, mañana y siempre. Y para terminar: Viva el pueblo cubano, Viva la Revolución cubana y Viva Fidel Castro.
Fuente: http://lapupilainsomne.wordpress.com/2013/06/21/willy-toledo-en-cuba-he-sufrido-las-consecuencias-de-la-censura-y-la-persecucion-politica/

Helen Prejean: una vida dedicada a los condenados a muerte

Aumentar tamaño del texto Disminuir tamaño del texto Partir el texto en columnas Ver como pdf 22-06-2013


Democracy Now!


Hace treinta años, le pidieron a una monja católica que trabajaba en un barrio pobre de Nueva Orleáns si podía ser amiga por correspondencia de un prisionero condenado a muerte. La hermana Helen Prejean accedió al pedido, y su vida cambió para siempre, al igual el debate sobre la pena capital en Estados Unidos.

Su experiencia sirvió de inspiración para la publicación de su primer libro, titulado Dead Man Walking: An Eyewitness Account of the Death Penalty in the United States (publicado en español con el título: Pena de Muerte), que acaba de ser reeditado con motivo de su vigésimo aniversario. Prejean era amiga por correspondencia de Patrick Sonnier, un homicida condenado a pena de muerte que estaba detenido en la tristemente célebre prisión de Angola, en Louisiana. Con su característico acento sureño, Prejean me habló de su primer encuentro con Sonnier: “Daba miedo. Nunca antes había estado en una prisión. Al ingresar te encuentras con todos esos detectores de metales y con los guardias. Y ellos gritan: ‘¡Mujer en el corredor!’. La gente se hace a un lado y yo pensé: ‘Cielos, estoy yendo directamente a la boca del lobo’. Y luego, también tenía un poco de miedo de conocerlo personalmente. Por suerte estábamos en cuartos separados. Él estaba detrás de una gruesa malla de separación. Cualquiera puede escribir lindas cartas pero nunca antes había hablado con un homicida durante dos horas. Pensaba: ‘¿Será humano? ¿Podremos mantener una conversación normal?’ Y cuando vi su rostro, era tan humano que quedé perpleja. En ese momento me di cuenta de que más allá de lo que él haya hecho, valía más que el peor de sus actos. Y ahí comenzó la travesía”.

La Hermana Helen se convirtió en la consejera espiritual de Sonnier. Conversaba con él mientras se acercaba la fecha de su ejecución. Fue la persona que compartió con él sus últimas horas y presenció su ejecución el 5 de abril de 1984. También fue la consejera espiritual de Robert Lee Willie, otro prisionero condenado a pena de muerte de la cárcel de Angola, que fue ejecutado ese mismo año. Años más tarde, se realizó una película basada en el libro, dirigida por Tim Robbins, con la actuación de Susan Sarandon en el papel de Helen Prejean y de Sean Pean en el personaje de Matthew Poncelet, un híbrido entre Sonnier y Williams. Sarandon ganó el Oscar a mejor actriz por su interpretación, y la película sirvió para reavivar el debate sobre la pena de muerte.

Estados Unidos es el único país industrializado del mundo que aún aplica la pena de muerte. En la actualidad hay 3.125 personas condenadas a muerte en el país, a pesar de que los opositores a la pena capital continúan logrando avances. Maryland ha sido el último estado en abolirla. Tras la aprobación de la ley, el gobernador del estado, Martin O’Malley, escribió: “Hay pruebas que demuestran que la pena de muerte no funciona como disuasivo, no puede ser aplicada sin prejuicios raciales y cuesta tres veces más que la cadena perpetua sin libertad condicional. Y, lo que es peor, no hay modo de revertir un error si se ejecuta a una persona inocente”.

Hay muchos estudios sobre la influencia de los prejuicios raciales. El Centro de Información sobre la Pena de Muerte citó un estudio de la revista Louisiana Law Review que establece que, en Louisiana, las probabilidades de que haya una condena a muerte son un 97% más elevadas en los delitos en los que la víctima es blanca, que en aquellos en los que la víctima es afroestadounidense. A nivel nacional, un 75% de los casos que terminaron con una ejecución tuvieron como víctimas a personas de raza blanca.

Si bien Colorado no es uno de los estados que abolió la pena de muerte, el gobernador John Hickenlooper utilizó su autoridad ejecutiva para otorgar una prórroga temporal a uno de los tres prisioneros condenados a muerte en el estado. En su declaración, el gobernador sostuvo: “Es una pregunta legítima [la de] si como estado deberíamos quitar vidas”.

Esta semana, Indiana liberó a una ex condenada a pena de muerte. Paula Cooper fue hallada culpable del asesinato de Ruth Pelke en 1985, y fue condenada a pena de muerte a los 16 años. En aquel entonces, fue la persona más joven condenada a esa pena en el país. El nieto de Pelke, Bill Pelke, realizó una fuerte campaña para pedir clemencia para Cooper: “Estoy convencido de que, sin duda, mi abuela estaría consternada por el hecho de que esta niña fuera condenada a pena de muerte y de que haya tanto odio e ira hacia ella. Cuando Paula fue liberada de la pena de muerte en el otoño de 1989 pensé ‘Bueno, ya está. Se salvó de la pena de muerte. Misión cumplida’”.

Sin embargo, Bill Pelke participó en una marcha que iba desde el pabellón de condenados a muerte de la prisión de Florida hasta Atlanta, donde conoció a la Hermana Helen Prejean. “Después de 17 días de caminar junto a esta monja, se aprende lo que es realmente la pena de muerte. Fue en esa marcha con la Hermana Helen Prejean que decidí dedicar mi vida a abolir la pena de muerte. Mientras haya un Estado en el mundo que mate a sus propios ciudadanos, voy a alzarme y denunciar que eso está mal”.

La Hermana Helen Prejean dijo que lamenta no haber logrado contactar a los familiares de las víctimas de los homicidios mientras era la consejera espiritual de Sonnier y Willie. Más tarde fundó la Asociación Survive, una organización de apoyo a los familiares de las víctimas de homicidio como Pelke. Finalizó nuestra conversación de esta semana con las siguientes palabras: “Acompañé a seis seres humanos y presencié su ejecución. Es a ellos a quienes debo mi trabajo, no puedo dejar de hacerlo. Seguiré haciendo esto hasta el día que me muera”.

Denis Moynihan colaboró en la producción periodística de esta columna.

© 2013 Amy Goodman

Texto en inglés traducido por Mercedes Camps. Edición: María Eva Blotta y Democracy Now! en español, spanish@democracynow.org

Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 750 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 400 en español. Es co-autora del libro "Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos", editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.

Fuente: http://www.democracynow.org/es/blog/2013/6/21/helen_prejean_una_vida_dedicada_a_los_condenados_a_muerte


viernes, 21 de junio de 2013

Política estadounidense contra Cuba, arbitraria y unilateral




Politólogos como el estadounidense Noam Chomsky y medios de prensa de diversos países concuerdan en que no hay una razón legítima para usar la arbitraria lista de terrorismo como arma política contra Cuba.
La lista estadounidense de países que patrocinan el terrorismo la confecciona el Departamento de Estado con aquellas naciones que Washington considera como colaboradoras de organizaciones terroristas.
La inclusión en el informe supone enfrentarse a estrictas sanciones y, en el caso de Cuba, responde a consideraciones unilaterales basadas en la hipocresía y la manipulación, según analistas.
A esa conclusión llegan muchos estudiosos sobre esa parte de la política de la Casa Blanca contra la isla, que lejos de cesar se reitera años tras año desde 1982, pese a la falta de argumentos creíbles que puedan justificarla.
En la lista, que se creó el 29 de diciembre de 1979 y entonces situó a naciones soberanas como a Libia, Irak, Yemen del Sur y Siria, se incluye a La Habana por el hecho, según Wikipedia, la enciclopedia libre en internet, de que el gobierno cubano proporcionó atención médica y asistencia política a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y a que miembros actuales y anteriores de Patria Vasca y Libertad (ETA) siguen viviendo en Cuba.
Esa misma publicación señala que las autoridades cubanas no proporcionaron "ni armas ni entrenamiento paramilitar, ya sea a ETA o las FARC", mientras que otras publicaciones plantean que estas relaciones respondieron en su momento a solicitudes de las autoridades de esos países para avanzar en procesos de diálogo o por razones humanitarias.
Politólogos como el estadounidense Noam Chomsky y medios de prensa de diversos países concuerdan en que no hay una razón legítima para usar la arbitraria lista de terrorismo como arma política contra Cuba.
A raíz de la publicación del informe el 30 de mayo de 2013, algunas voces críticas estiman que al continuar haciéndolo el Departamento de Estado se basa tan solo en diferencias ideológicas.
Llama la atención que en meses próximos a la fecha para dar a conocer su enfoque unilateral del problema y carentes de argumentos para tal política, sectores contrarios comenzaron a crear un ambiente hostil a fin de reiterar una decisión que para muchos es indefendible.
El informe de 2013 sostiene que "el gobierno cubano sigue protegiendo a fugitivos buscados en Estados Unidos. El gobierno cubano también proporciona apoyos como viviendas, bonos alimentarios y atención médica a esos individuos" y descubre, por primera vez, la presencia de separatistas vascos en Cuba.
Al Departamento de Estado no le quedó más alternativa, además, de reconocer que Cuba "acoge un diálogo de paz" entre la guerrilla y el Estado colombiano, y señala que no hay "ningún indicio de que el gobierno cubano proporcione armas o entrenamiento paramilitar a grupos terroristas" .
Según el exjefe de la Oficina de Intereses de Washington en La Habana, Wayne S. Smith, el gobierno colombiano, lejos de acusar a Cuba de albergar a guerrilleros, saludó varias veces la contribución de La Habana al proceso de paz.
En el caso de los miembros de ETA, el Departamento de Estado no habla de que la presencia de los vascos en la isla respondió a una petición del gobierno español de Felipe González de acoger a unos dirigentes, en el marco de negociaciones de paz con la organización separatista.
Durante el segundo trimestre del año, grupos afines a la ultraderecha de Miami y voceros del propio gobierno comenzaron a inflar acusaciones contra La Habana basadas en que las autoridades permiten a perseguidos por la justicia norteamericana encontrar refugio en la isla.
Con una precisión sorprendente, retomaron el caso de la luchadora estadounidense Assata Shakur, quien no aparece en la lista de terroristas buscados en el país.
Fue acusada de matar a un policía estatal de Nueva Jersey hace 49 años, y súbitamente resultó calificada como una de las terroristas más buscadas por el Buró Federal de Investigación (FBI), con una recompensa de dos millones por su cabeza.
Shakur, quien huyó a Cuba en 1979 y recibió asilo político, ha declarado constantemente su inocencia. Según expertos, categorizar a Shakur como terrorista podría poner en peligro su vida a manos de los que querrían cobrar la recompensa, y ha llevado a funcionarios del Departamento de Estado a utilizar su cambio de estatus como una justificación para mantener a Cuba en la lista.
Los que siguen el tema estiman que la reiteración del caso de Cuba es un movimiento de sectores conservadores con influencia en el gobierno ante posibles movimientos del secretario de Estado, John Kerry, de propiciar cambios en la política hacia la isla del Caribe.
El énfasis puesto en que el gobierno cubano sigue protegiendo a fugitivos buscados en Estados Unidos puede convertirse en un arma de doble filo para Washington pues hay abundantes evidencias y hechos palpables de que ese país le brinda refugio a terroristas internacionales, no solo cubanos como Luis Posada Carriles.
En los últimos años, destaca la relación de autoridades estadounidense con el terrorista checheno Ilyas Akhmadov, con un abultado prontuario de acciones criminales por lo que es uno de los hombres más buscados por Rusia.
Akhmadov fue subalterno del islamista radical Shamil Basayev, quien encabezó una acción de separatistas contra Moscú, cuando tomaron más de mil rehenes en un hospital en Budyonnovsk, en 1995.
Reside Akhmadov en territorio estadounidense gracias al apoyo de importantes figuras como la exsecretaria de Estado Madeleine Albright y el senador republicano John McCain, entre otros, que justifican estas relaciones y otras con grupos como al-Nusra, presente en la lista de organizaciones terroristas, porque sirven a los intereses de la política de Washington.
Ante este doble rasero político, una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba expresa que "nuevamente, esta decisión bochornosa ha sido tomada faltando de manera deliberada a la verdad e ignorando el amplio consenso y el reclamo explícito de numerosos sectores de la sociedad estadounidense y de la comunidad internacional para que se ponga fin a esa injusticia".
El Gobierno de los Estados Unidos insiste en mantener esta designación arbitraria y unilateral, a pesar del desplome total de las acusaciones ridículas y de los argumentos endebles que tradicionalmente ha utilizado en los últimos años como excusas para ello, señalan los cubanos.
Asimismo agregan que la Casa Blanca emplea el terrorismo de Estado como un arma contra países que desafían sus intereses, causando muertes en la población civil. Ha usado aviones no tripulados para perpetrar ejecuciones extrajudiciales de supuestos terroristas, incluso estadounidenses, resultado de lo cual han muerto cientos de civiles inocentes, subraya.
El gobierno de la isla también acusa a Washington de albergar a terroristas de origen cubano responsables de varias centenas de asesinatos, algo que Estados Unidos no niega. Desde 1959, el terrorismo procedente de Estados Unidos costó la vida a tres mil 478 cubanos.
El caso más emblemático es el de Luis Posada Carriles, reclutado por la CIA en 1961 y responsable de más de un centenar de asesinatos, entre ellos el atentado del 6 de octubre de 1976 que provocó la explosión en pleno vuelo de un avión civil en Barbados, ocasionando la muerte de 73 personas.
Muchos hoy se preguntan qué razón tenían las autoridades de la isla, a no ser su disposición a luchar contra el flagelo, para alertar a Washington con informes sobre 64 personas implicadas en actos de terrorismo contra el país y que fueron entregados al FBI, el que lejos de actuar contra estos, lo hizo contra un grupo de cinco jóvenes cubanos que ayudaron a modelar y recopilar la información.
Hoy ese grupo representa la prueba indiscutible de que lejos de propiciar y apoyar el terrorismo, las autoridades cubanas lo combaten, según expresa en un análisis Salim Lamrani, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
Fuente: http://www.telesurtv.net/articulos/2013/06/20/politica-estadounidense-contra-cuba-arbitraria-y-unilateral-2177.html


La metadata que la NSA de EEUU está espiando de todas sus comunicaciones





Después de la denuncia de Snowden sobre el proyecto PRISM (prisma) de la NSA, el presidente estadounidense Barack Obama ha respondido que no están espiando el contenido de la información que por la red de redes transmiten los ciudadanos. Que solamente están coleccionando “Metadatos” y que ello es legal, que la gente no tiene porqué preocuparse de que su administración haga eso.
En forma general, los Metadatos son datos acerca de los datos y ello es un concepto difuso. No especifica cuánto y qué tipos de datos se recogen. Eso resultó conveniente para Obama y por ello deliberadamente no aclaró qué significado tienen, ni qué se puede deducir de ellos. Así que para ayudar a comprender de qué se trata este asunto voy a apoyarme con dos ejemplos, uno teórico y otro práctico que espero permitan entender realmente el tema y decidir cuan peligroso es recolectar esos Metadatos.
Suponga que yo le diga a usted que no escucho sus conversaciones telefónicas, pero que cada vez que usted llama, grabo a cuál número lo hizo, cuanto duró la conversación, en cual fecha y hora aconteció eso. Además, también guardo por cuales centrales telefónicas viajó la comunicación, la intensidad de la llamada, la calidad del servicio usado, así como las antenas repetidoras y proveedores de comunicación que estuvieron involucrados como soporte tecnológico para brindarle la comunicación deseada. Eso son metadatos de su conversación telefónica y uno podría reconocer patrones de sus intercambios de llamadas. Por la secuencia de fechas y horas de llamadas, cantidad de veces y números destinatarios uno podría deducir cuáles son el grupo de personas con las que últimamente está trabajando. Y si las llamadas las ha hecho desde un teléfono móvil en movimiento, puedo saber en cuáles lugares ha estado. Si grabo algo similar con sus interlocutores, entonces puedo saber hasta cuando estuvieron juntos. Todo eso sin haber escuchado el contenido de su llamada, que por cierto en el caso de los proveedores de acceso a la Internet, por ley queda registrada por años para casos donde el mismo gobierno, aduciendo un asunto de seguridad nacional o lucha contra el terrorismo, demande que se le entregue.

El otro ejemplo lo puede confirmar usted mismo y por ello le propongo haga el siguiente experimento:
1.- En una máquina con Windows seleccione visualmente cualquiera de los archivos que ha escrito con Word.
2.- Coloque el cursor sobre el ícono de ese archivo y oprima el botón de la derecha de su ratón.
3.- Del menú que aparece busque la opción de “Propiedades”.
4.- De la pestaña que aparece escoja la alternativa “detalles”.


Todo lo que aparece allí es Metadatos y toda esa información es la que viene recogiendo la NSA, a escondidas de usted, de cualquier archivo de texto, imágenes, audio y vídeo que transfiere en la red. Así les es posible determinar qué tipo de documento usted está descargando o enviando, quién es el autor del mismo, en cual equipo se procesó, y otras características más. Escogí una máquina Windows porque, lamentablemente, son extensamente usadas, más no porque sea lo mejor. De hecho el usar cualquier equipo de Microsoft le facilita la recolección de Metadatos. Es preferible usar Canaima GNU Linux, aunque ello no elimina por completo el problema de los metadatos.
También existen herramientas para extraer los metadatos de sus archivos, antes de transmitirlos por Internet, para Windows, Linux y MacOSX. Pero el asunto principal es, ¿quién le ha dado derecho a que el gobierno estadounidense para que recoja todos esos datos de todas nuestras comunicaciones en la red? ¿dónde queda nuestra privacidad? ¿no están invadiendo nuestras vidas?
Si uno publica una fotografía en Facebook ellos recogen todos esos metadatos, si envías un documento adjunto por correo electrónico, también obtienen sin nuestro consentimiento y en forma oculta esos metadatos. Si tuiteas algo, ellos capturan tu identidad y el número de tu mensaje al igual que los seguidores que lo recibieron. Si uno se conecta a un sitio web, obtienen nuestra dirección IP, la ruta de nuestros datagramas y el sitio al cuál accedimos. Hasta podrían saber qué páginas logramos ver.
En fin, reflexione sobre si ¿es necesario escuchar sus conversaciones para poder armar un expediente sobre su vida? Si conozco el diario que acostumbra a leer, los programas de TV que acostumbra a mirar, los restaurantes en donde a menudo come, las tiendas donde hace sus compras cotidianas, si asiste a algún tipo de iglesia, las agencias bancarias donde entra, los cajeros automáticos donde hace operaciones, las personas que frecuenta y los bares en que se relaja. Muchas de estas cosas ahora la gente tiende a hacerla por Internet, y eso le pone a la NSA en bandeja de plata un modo fácil para espiar a millones de seres humanos diariamente. Todo lo que esta agencia pueda deducir de ello lo provee el poder de recabar y analizar los metadatos nuestros. Ahora bien, ya que lo comprende decida usted si desea que alguien esté espiando todo eso de su vida para supuestamente protegerle.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Desarrollo alternativo o alternativa al desarrollo


Herria2000 Eliza

(Cómo montar una tienda de 'comercio justo' y no morir, ni matar, en en el intento)

Cualquier “proyecto alternativo” es alternativo, ya sea porque pretende alcanzar otro objetivo distinto y mejor o porque intenta llegar al mismo objetivo, pero por un camino diferente, más fácil, rápido y con menos efectos colaterales negativos. Para disimular que no sabemos a dónde queremos llegar, que no tenemos valor o voluntad de realizar el trayecto, que no queremos saber a dónde nos lleva o no queremos que nadie lo sepa argumentamos poéticamente: “el camino es la meta”. Al enredar los objetivos con el camino en un proyecto de economía alternativa como, por ejemplo, una tienda de “comercio justo”, nos confundimos y confundimos a los demás con las prioridades, con lo estratégico y lo táctico, lo posible y la excusa de lo pragmático. Y cuando aplicamos el principio del mal men or enredamos un mal camino con los mayores males. A l describir en términos generales con eufemismos, tópicos y clichés tanto los objetivos como la trayectoria del camino convencemos a los ya convencidos pero a nadie más. Así, a pesar de su potencialidad de cambiar el mundo, matamos nuestra pequeña tienda de comercio justo antes de empezar a andar y hacer camino.
Supongamos que somos honestos y conscientes, que estamos comprometidos con un cambio de hondo calado, con un comercio más justo y otro mundo posible. ¿Por qué cuesta tanto hacerlo viable y convence a tan pocos? Pongamos que no nos falta imaginación ni iniciativa ni valor ni ganas ni conocimientos técnicos, de gestión y de marketing, ni capital inicial. ¿Por qué no funciona? “No se puede vencer al capitalismo con sus propias armas” y “no se puede solucionar un problema con la misma lógica que lo ha producido”, y mucho menos en tiempos de crisis del sistema.
Unos excelentes conocimientos de economía, adquiridos en largos estudios académicos especializados dificultan la viabilidad de un proyecto alternativo sin unos conocimientos políticos y las adecuadas herramientas ideológicas, a poder ser no demasiado académicas. Montar una pequeña y hermosa tienda de comercio justo es un ejemplo, una forma para adquirir este conocimiento, el saber, las “armas” alternativas y la otra “lógica”, de la que nos hablaron el Che y Einstein. Utilizándolas en la práctica aprenderemos a diferenciar un proyecto de desarrollo alternativo de un proyecto alternativo al “desarrollo”, el camino alternativo, verde y con label que nos llevará al mismo abismo de este otro camino que nos acercará al tan necesario otro mundo posible, a la Utopía.
¿Cómo montar un proyecto alternativo y no morir en el intento ni matar al niño antes de tiempo? En primer lugar, es esencial conocer las condiciones objetivas tanto locales como globales. En segundo lugar, es esencial analizar las condiciones subjetivas, nuestra propia alienación. No equivocarnos de sueño. Soñar la Utopía para alcanzarla, sí. Soñar el camino jamás. Esto es la pesadilla.
Existen dos principios motores del desarrollo actual: “máximo beneficio en el mínimo tiempo” y “todo empresario aspira a ser el único empresario”: rentabilidad y competitividad, hasta ser el hombre más rico, el más grande, el único y último. Ambos principios están basados en la propiedad privada como “ley natural” y “derecho universal” inalienable. Sin embargo, en un mundo de recursos limitados donde la única manera de crear riqueza es a través del trabajo humano (el dinero puede hacer más dinero, pero nunca producir riqueza) solamente se puede cumplir con ambos principios si se viola la “ley natural” y “derecho universal” de la propiedad privada. Hay que robarle a las mujeres y a los otros hombres el producto de su trabajo, la propia fuerza de trabajo y, finalmente, su mera existencia e identidad genética como botín y mercancía. A la vez, se ha de esquilmar a la Naturaleza sus riquezas materiales y no materiales, transformar su valor de uso en valor de cambio y cambiar todo por dinero, que no alimenta, y despilfarrando irreversiblemente la riqueza que sea necesaria en el camino a ser el último. También este camino se hace al andar.
Para evitar a corto plazo el caos se formulan leyes con las que se legaliza el crimen de generar miseria, de matar por hambre y con guerras, de exterminar la vida pacifista y humanitariamente a cómodos plazos 1 . Esto es lo que significa tácitamente el “derecho universal” para el rico y es perfectamente compatible y coherente con sus principios universales de rentabilidad y con la ley natural de la competitividad. Todas las formulaciones de derechos universales, derechos constitucionales, legislaciones estatales, normativas administrativas, mandamientos morales, etc.,son, en sus manos, armas de destrucción masiva para imponer sus principios y privilegios, y enmascarar las consecuencias. En manos de la gente no son más que herramientas, necesarias, pero muy endebles. Olvidar esto es envenenar al niño.
Repetir mil veces como Goebbels que “otro mundo es posible” no lo hace posible. Imprimirle un label o la marca de “alternativo” a una idea, iniciativa o empresa no la hace alternativa. Quizás viable para sí misma pero no para la vida de los demás. Hace mucho que los aspirantes a único y último empresario han robado este label y patentado la marca para prostituirla como propaganda en sus campañas de marketing para hacer más dinero.
Repiten hasta la saciedad que “no hay alternativa” precisamente porque “haberlas, haylas”. Y les tienen terror. Mientras no requieran de su “guerra global contra el terrorismo” nos arrullan con la nana de “lo pequeño es hermoso”. En su contexto impuesto lo pequeño es estúpido. El tamaño sí importa y mucho. El Gran Capital tolera lo alternativo si es pequeño y marginal. Si es grande y viable lo destruye. Posee todos los recursos para hacerlo y carece de escrúpulos para no hacerlo. “No es posible otro mundo hasta que no se muera este” o lo matemos y tiene que ser antes de sobrepasar el punto de no retorno. Si no, nos habrá matado antes de caernos muertos. Por ello estamos obligados a competir con una alternativa viable, grande y poderosa … y esto la hará hermosa.
Para garantizar la viabilidad de la pequeña tienda de comercio justo en este mundo del gran comercio criminal y que sea hermosa, coherente y cumpla con todos los principios éticos, ecológicos y de justicia, además de la legalidad y con Hacienda, hay que trabajar jornadas de 26 horas al día, 8 días a la semana, 14 meses al año hasta 2-15 años después de muerto. Sin una jornada así necesitamos grandes cantidades de voluntariado. Sin triple jornada no es posible ninguna alternativa. La inmensa mayoría social democrática ya está trabajando o buscando desesperadamente trabajar en doble jornadas para un patrón y el sistema. Y las mujeres tres. Los proyectos alternativos, si son una alternativa al paro, no son alternativas. Son una trampa al solitario.
En el mundo laboral real ocurre que c uanto más viable y competitivo hagamos nuestro proyecto más desaparece lo alternativo. Cuanto más grande, eficiente y viable hagamos la alternativa menos logramos mostrar lo esencial, lo pequeño y hermoso que está en su interior: su potencial para convencer a la gente de que alternativas “haberlas, haylas”. Claro que para que la tienda de comercio justo logre convencer y movilizar a la gente como proyecto alternativo para cambiar el comercio oficial es necesario que sea una tienda grande, viable y competitiva. Esta contradicción dentro de nuestra pequeña tienda de comercio justo solamente la superaremos aliados con el poder popular.
Para desarrollar un espacio o una red de proyectos alternativos autárquicos, entre ellos, las tiendas de comercio justo que cambien el comercio cada día más criminal e injusto para todas y todos en un comercio cada vez menos injusto para todos y todas, y para que sea viable y competitivo es imprescindible una gran reforma agraria agroecológica que garantice la soberanía alimentaria como base para el cambio de lógica y de poder. En la América empobrecida hay condiciones de triplicar en tiempo razonable la producción de alimentos con pequeñas y hermosas alternativas agroecológicas. En Europa no. No hay tierras sin utilizar, no hay apenas agricultores ni queda apenas diversidad genética. Y la política institucional no cambia de lógica ni con los Verdes en el gobierno. ¿Quizás desde otro modelo popular de consumo sea posible cambiar el agro?
Necesitamos espacios y garantías para las tiendas de comercio justo y para los agricultores, y protección frente a la competitividad y el dumping de la Nestlé, la CocaCola y demás grandes consorcios económico-financieros. Para hacer viable una alternativa general del funcionamiento y organización de nuestra sociedad tenemos que desarrollar un poder político institucional alternativo que sea una alternativa a la política institucional democrática, por muchas promesas y discursos verdes, sostenibles y con label alternativo de algunos. Esto incluye las instituciones de educación, académicas y de investigación científica, etc. Su hipócrita adaptación curricular a las “necesidades de la sociedad” con financiación del sector privado o directamente privatizada s equivale a mo ntarnos en su tren de alta velocidad hacia el abismo.
Occidente robó de las colonias suficiente riqueza para capitalizar y desarrollar su revolución industrial de producción intensiva en gasto de energía utilizando solo lo más eficiente de la mano de obra y dejando morir o matando legalmente a la población sobrante. Para evitar que la humanidad se rebelara las oligarquías invertían en un colchón social alienado del que formamos parte aquí. Para no sucumbir al poder militar, tecnológico y financiero de Occidente China utiliza ahora las mismas herramientas y valores (o crímenes) capitalistas. Pero por otro lado, a través de su política institucional siguen organizando su producción intensiva en mano de obra y ahorradora de energía absorbiendo toda la fuerza laboral disponible por pequeña y residual que sea. Esto incluye desde el trabajo familiar, de ancianos, infantil, etc. Tardaron siglos y agotadoras jornadas pero están en disposición de no dejarse destruir por el modelo occidental. China es viable y competitivo en este mundo.
Asimismo, aprovechar todos los pequeños y hermosos restos marginales e ineficientes migajas residuales de fuerza laboral despreciadas por el gran capital junto a las voluntarias por convencimiento ideológico y ético es hacer viable la pequeña tienda de comercio justo. Sin olvidar que cualquier gran espacio o red autárquica alternativa, del cual forman parte las pequeñas empresas, hay que poder defenderlo antes o después con potencial humano, armamento y estrategia militar. China lo ha logrado por ahora con su ejército y la bomba atómica a un costo humano suicida. Hay que trabajar en alternativas a las grandes inversiones en carrera armamentista, al equilibrio nuclear, a la Guerra Fría, a la biológica, química y mediática. Y ha de ser más que viable. Ha de ser victoriosa. En esta lucha por la viabilidad de las tiendas de comercio justo y otras alternativas no son suficientes las “palabras-bomba” ni las pistolas de agua ni los fusiles con flores. Necesitaremos grandes hospitales y no pequeñas tiritas.
Mientras no tengamos todas estas condiciones de legislación, justicia, reforma agraria, soberanía alimentaria, política fiscal, educativa y académica, eliminación de la propiedad privada y defensa militar de todo ello solo nos queda “trabajar, trabajar, trabajar” en nuestras pequeñas y hermosas alternativas. Esta es la cuestión. La otra cuestión es más que saber “qué hacer” saber qué no hacer para no montarnos nunca en su pequeño y hermoso carrusel de desarrollo alternativo. Si a su tren de alta velocidad lo vemos verde, justo, biológico y ecológico, eso es producto del crak con el que nos droga el Gran Hermano de nuestro Mundo Feliz.
Este artículo se publicó en el nº243 de la revista Herria2000 Eliza.
Nota:
1 Los intereses, véase la letra pequeña, del artículo 88.666a-z
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Cómo la seguridad de EEUU quedó a cargo de una compañía privada


IPS Noticias


Edward Snowden, empleado de la empresa privada de inteligencia Booz Allen Hamilton, filtró información sobre la Agencia Nacional de Seguridad, de Estados Unidos, en especial sobre el área de los contratistas, que insume alrededor de 70 por ciento de los 52.000 millones de dólares del presupuesto nacional destinados a los servicios secretos. Algunos analistas aprovecharon las revelaciones de Snowden para denunciar el papel de los contratistas privados en el gobierno y en la seguridad nacional, y arguyeron que debe quedar en la órbita de organismos públicos.
Pero sus críticas no dan en el blanco, pues se volvió muy difícil separar ambas esferas.
Es que están totalmente entrelazados los funcionarios de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés), que incluye a las de entidades como la Agencia Central de Inteligencia (CIA), y los empleados de compañías como Booz Allen Hamilton.
El papel que desempeñan en el sector privado se entrelaza con el que realizan para el gobierno, promocionándose entre sí y actuando en su propio provecho, lo que vuelve redundante la clásica rotación de personal entre estos dos ámbitos.
Snowden, un administrador de sistemas del Centro de Operaciones de Amenazas de la NSA en Hawaii, trabajó para la CIA y para la compañía de servicios de informática Dell antes de unirse a Booz Allen. Pero el oscuro papel que pudo desempeñar palidece al lado del que tuvieron otros.
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Para comprender esta compleja trama, hay que remontarse a R. James Woolsey, un exdirector de la CIA que compareció ante la Cámara de Representantes en el verano boreal de 2004, para promover la idea de integrar los programas de espionaje extranjero e interno para perseguir “terroristas”.Un mes después apareció en el canal de televisión MSNBC hablando sobre la urgente necesidad de crear una nueva agencia de inteligencia que ayude a ampliar el aparto de vigilancia nacional tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra Nueva York y Washington.
En ninguna de esas apariciones públicas, Woolsey mencionó que era vicepresidente de seguridad estratégica global de Booz Allen, cargo que desempeñó entre 2002 y 2008.
“La fuente de información sobre las vulnerabilidades de un posible ataque sobre nuestro territorio no va a depender de la inteligencia extranjera, como durante la Guerra Fría”, opinó.
“Los terroristas nos comprenden bien y viven y se organizan donde no los vamos a espiar, en Estados Unidos”, señaló Woolsey ante el comité selecto de seguridad interior de la Cámara de Representantes, el 24 de junio de 2004.
“El problema es que el sector de la inteligencia creció tanto desde 1947, cuando se creó el cargo de director de la inteligencia central, que se volvió imposible desempeñar ambos cargos, dirigir la CIA y manejar todo el sector”, explicó Woolsey tiempo después en otro programa de televisión.
Director de Inteligencia Nacional
Volviendo a 2007, el vicealmirante retirado Michael McConnell, entonces vicepresidente de Booz Allen para política, transformación, seguridad interna y análisis de inteligencia, pasó a ser el segundo al mando de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (DNI, por sus siglas en inglés), responsable de las 17 agencias de seguridad dependientes de Washington.
Y como por coincidencia, su nuevo lugar de trabajo estaba a solo tres kilómetros del anterior.
Tras retirarse como DNI en 2009, McConnell regresó a Booz Allen, donde aún se desempeña como vicepresidente.
En agosto de 2010, el teniente general retirado James Clapper, exvicepresidente de inteligencia militar de Booz Allen (1997-1998), se convirtió en el cuarto DNI, cargo que desempeña hasta hoy.
De hecho, los ejecutivos de Booz Allen ocuparon dicho cargo durante los cinco de sus ocho años de existencia.
Cuando esos dos hombres estuvieron al frente de la seguridad nacional, contribuyeron a su ampliación y privatización como nunca antes.
McConnell, por ejemplo, pidió al Congreso legislativo que modificara la ley de Vigilancia de Inteligencia Exterior para que la NSA pudiera espiar a países extranjeros sin necesidad de una orden, si estos utilizaban tecnología de Internet encaminada por Estados Unidos.
La semana pasada, Snowden reveló a Glenn Greenwald, colaborador del diario británico The Guardian, que la NSA había creado un programa de vigilancia electrónico llamado “Prism”, que le permitía a la agencia espiar los datos electrónicos de ciudadanos del mundo entero, dentro y fuera del territorio estadounidense.
El trabajo de Snowden en las oficinas de Booz Allen en Hawaii era mantener los sistemas de tecnología de la información de la NSA.
Snowden no explicitó cuál era su relación con Prism, pero dijo al diario South China Morning Post que la NSA había pirateado redes troncales, básicamente grandes routers (encaminador) de Internet, que le daban acceso a las comunicaciones de cientos de miles de computadoras sin tener que piratear a cada una”.
Woolsey defendió ese tipo de vigilancia cuando The New York Times reveló las intervenciones telefónicas sin orden judicial realizadas por la NSA en diciembre de 2005.
“A diferencia de la Guerra Fría, nuestras necesidades en materia de inteligencia no están solo en el extranjero”, arguyó ante un comité jurídico del Senado, refiriéndose a la NSA, en febrero de 2006.
“Los tribunales no están preparados para los campos de batalla electrónicos que se mueven con rapidez y en los que se pueden confiscar computadoras de (la red extremista) Al Qaeda o (del libanés) Hezbolá que tienen una gran cantidad de direcciones de correo electrónico y de teléfonos que hay que revisar de inmediato”, explicó.
Relaciones estrechas
Las tareas concretas que Booz Allen hace para el sistema de vigilancia electrónica de la NSA filtradas por Snowden son clasificadas, pero se puede deducir de forma bastante acertada a partir de contratos similares; un cuarto de los ingresos trimestrales de la compañía, unos 5.860 millones de dólares, proceden de agencias de inteligencia.
La NSA, por ejemplo, contrató a esa compañía en 2001 para que asesorara la iniciativa Project Groundbreaker, de 5.000 millones de dólares, para reconstruir y operar los sistemas de redes de computadoras y de teléfonos internos no esenciales.
Booz Allen también obtuvo ese año una gran parte del contrato de Total Information Awareness para acopiar información sobre posibles terroristas en Estados Unidos a partir de registros telefónicos, recibos de tarjetas de crédito y otras bases de datos. Fue un controvertido programa al que el Congreso retiró los fondos en 2003, pero cuyo espíritu sobrevivió en Prism y en otras iniciativas divulgadas por Snowden.
La CIA pagó a un equipo de Booz Allen, encabezado por William Wansley, exfuncionario de inteligencia del ejército, para realizar “planificación estratégica y empresarial” para su Servicio Nacional Clandestino, que realiza operaciones encubiertas y recluta espías extranjeros.
En enero, Booz Allen fue una de las 12 empresas que obtuvo un contrato de cinco años de la Agencia de Inteligencia de la Defensa, que podría ascender a 5.600 millones de dólares, para concentrarse en “operaciones de redes de computadoras, tecnologías emergentes y perjudiciales y actividades de entrenamiento y capacitación”.
La Armada de Estados Unidos eligió el mes pasado a la misma compañía como parte de un consorcio para trabajar en otro proyecto multimillonario para una “nueva generación de operaciones de inteligencia, vigilancia y combate”.
Booz Allen obtiene esos contratos de varias formas. Además de sus vínculos con el DNI, se jacta de que la mitad de sus 25.000 empleados están autorizados información de inteligencia ultra secreta.
Un tercio de las 1,4 millones de personas con ese permiso, trabajan en el sector privado.
* Con aportes de Jim Lobe
Fuente: http://www.ipsnoticias.net/2013/06/como-la-seguridad-de-eeuu-quedo-a-cargo-de-una-compania-privada/

jueves, 20 de junio de 2013

En Washington, los halcones se comieron las palomas





Hace muchos años, allá por los sesentas,  cada vez que se comentaba sobre la política exterior de los diferentes  gobiernos norteamericanos, se decía  que esta estaba  principalmente dividida entre dos facciones diametralmente diferentes, aquella que apoyaba la guerra y la violencia para enfrentarse a los conflictos mundiales y aquella otra, que decía que lo mejor era utilizar la diplomacia y el diálogo amigo para resolver los diferendos entre naciones. Eran los tiempos en que se decía que por los cielos de Washington volaban en armonía las palomas y los halcones, cada uno haciendo sus nidos en el  Capitolio, el Departamento de Estado, el de Defensa o en la mismísima Casa Blanca.  A pesar que la cadena de guerras contiguas nunca se ha detenido en su crecimiento, ambas facciones lograban, en aquella época,  que se estableciera un debate civilizado sobre los temas  antes de volver a agregar un nuevo eslabón a la misma.

De aquella época ha pasado mucho tiempo, y definitivamente, los halcones se comieron las palomas.  Ahora en los cielos de Washington solo se ven volar a esas inmensas aves, que  no comparten sus nidos con nadie. Los halcones se hicieron dueños de la política exterior de los Estados Unidos y no están dispuestos a compartirla. Paloma que llega al poder, paloma que sufre una metamorfosis y se transforma en halcón.  Obama es el clásico ejemplo.

El gobierno de EE.UU. acaba de anunciar que, en lo adelante, la ayuda militar que le estaban dando clandestinamente e indirectamente a los rebeldes sirios será entregada en forma directa y pública.  Nada, que el Presidente se acaba de quitar la careta, su proceso metamórfico se acaba de consumar.

Es muy curioso que la Casa Blanca haya escogido este momento para hacer tal declaración.  Hace solo dos días que salió publicado en la prensa que el ex Presidente Bill Clinton declaró que Obama  no debía de seguir haciendo caso a la opinión pública del país, que en su mayoría se opone a una intervención directa de su gobierno en el conflicto sirio,  y que tenía que adoptar una posición más fuerte contra los gobernante de Siria.

Clinton criticó a Obama por este estar dejándose  influir por esa inmensa porción de la población que está cansada de ver a su país estar dando saltos de guerra en guerra.  Básicamente, Clinton le dijo a Obama que lo que piensa la mayoría de los ciudadanos no debe de tener ninguna importancia. ¿Y qué pasa con el gobierno de la mayoría? ¿No se afirma una y otra vez que este es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo?

El ex Presidente hizo sus críticas declaraciones con el Senador John McCain parado a su lado, el mismo Senador que trató y no pudo ganarle a Obama en las elecciones del 2008, el mismo que hace solo unos días entró clandestinamente en territorio sirio para entrevistarse con los enemigos del gobierno de aquel país. Por cierto, hay que preguntarse qué hubiera pasado si, por esas cosas del destino, este aguerrido Senador hubiese caído prisionero o muerto a manos de las autoridades legítimas sirias. Perfectamente, cualquiera de las dos cosas pudo haber sucedido. Este come candela  Senador, que posa de ser más bravo que el más bravo, pudo haber creado un tremendo conflicto por su irresponsable actividad intervencionista. Pues bien, al lado de este personaje fue que el ex Presidente Clinton hizo sus declaraciones, las cuales le sirvieron a Obama para buscar una excusa y enviar ayuda directamente a los rebeldes sirios.

La excusa que ha alegado el Presidente en esta ocasión es la de que el ejército sirio ha estado utilizando armas químicas contra sus enemigos, una excusa más o menos igual a la que utilizó Mr. W Bush para justificar la carnicería que hizo en Irak con sus indiscriminados bombardeos a las ciudades iraquíes.  Da la casualidad que hace muy poco tiempo que salió a la luz pública, por expertos de las Naciones Unidas, que los rebeldes sirios habían sido los que utilizaron ese tipo de armas en contra de la población civil y en contra del ejército.  Sin embargo, ahora el gobierno alega que los reportes sobre esas alegaciones eran imposibles de confirmar, pero que el uso de dichas armas por parte del gobierno sí se había probado. Claro que, como lo que se busca es satanizar al gobierno, hay que darle credibilidad a los que más convienen.

Los halcones vuelven a la carga en los cielos de Washington y me temo que no van a parar de volar hasta que no vuelvan a llevar a este país a desembarcar marines en otro nuevo lugar, un lugar, por cierto, muy peligroso y muy riesgoso, un territorio que históricamente siempre ha estado en llamas y de donde es muy difícil no salir quemado.

 

Acuerdo comercial UE-EE.UU. ¿Quién está escribiendo el guión?

Corporate Europe Observatory

Está en fase de negociación un acuerdo comercial de largo alcance entre Estados Unidos y la Unión Europea: el Transatlantic Trade and Investment Partnership (Asociación transatlántica para el comercio y la inversión( TTIP) también conocido como Tratado Transatlántico de Libre Comercio (TAFTA). Sin embargo, la Comisión Europea ha corrido una cortina de humo sobre quién establece el orden del día de su posición negociadora. En medio de preocupaciones por el impacto social y ambiental del acuerdo, así como de su significado para una formulación democrática de las políticas, Corporate Europe Observatory (Observatorio de la Europa Corporativa) ha tratado de averiguar qué se va a poner sobre la mesa para su discusión.     Traducido del inglés para Rebelión por S. Seguí

Las negociaciones para el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Estados Unidos acaban de ser lanzadas oficialmente. Bajo la guía intelectual del Grupo de trabajo de alto nivel de trabajo para el empleo y el crecimiento 1 , creado en 2011 y presidido por el comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht y el entonces representante comercial de EE.UU., Ron Kirk, en su último informe dicho Grupo no sólo recomendaba entablar ya las negociaciones, sino que indicaba con cierto grado de detalle los temas que deberían ponerse sobre la mesa, con el objetivo de largo alcance de avanzar hacia un “mercado transatlántico”. El acuerdo propuesto está siendo seguido de cerca por grupos de interés público preocupados por que el acuerdo abra las compuertas a los organismos modificados genéticamente (OMG) y al gas de esquisto ( fracking ) en Europa, sea una amenaza a los derechos digitales y laborales, y faculte a las empresas a impugnar legalmente una amplia gama de normas que no son de su gusto. Con todo esto y más en juego, Corporate Europe Observatory quiso saber quién formaba parte de ese Grupo que recomendaba entablar las negociaciones. Con arreglo a las normas comunitarias de acceso a la información, el 4 de marzo de 2013, solicitamos la “lista completa de los miembros que componen el Grupo de trabajo de alto nivel sobre el empleo y el crecimiento”. De hecho, tuvimos que hacer numerosas solicitudes 2 .
¿Un grupo sin miembros, un informe sin autores?
Según la Comisión, el Grupo, que está operativo desde 2011 y que ha elaborado dos informes, no tiene miembros identificables (“no existe una lista de miembros del HLWG”). La Comisión también nos informó de que “varios departamentos” han contribuido al debate y a los informes del grupo (sin miembros), pero añadiendo que “no hay ningún documento que contenga la lista de los autores de los informes”. Puesto que no había tal documento, afirmaba la Comisión, nuestra petición no entraba en el marco de las normas de libertad de información de la UE: “Desafortunadamente no estamos en condiciones de ofrecerles la información solicitada.”
También nos dijeron que el HLWG no era “un grupo de expertos pertenecientes a las categorías mencionadas en el registro de grupos de expertos y otras entidades similares”. ¿Por qué no? “En primer lugar, se trata de un grupo de trabajo conjunto establecido por el gobierno de EE.UU. y la Comisión Europea, y en segundo lugar, su función no es la de proporcionar asesoramiento y conocimientos especializados a la Comisión Europea”, afirmaba la misma. A esto replicamos que el HLWG, como cualquier otro grupo de expertos o entidad similar, debe estar sujeto a los requisitos de transparencia establecidos en la normativa sobre los grupos de expertos de la Comisión 3 , que incluye la transparencia sobre los participantes.
¿Es el mundo empresarial quién dicta el orden del día? La Comisión no sabe, no contesta.
Cuando preguntamos acerca de los “expertos externos” que habían participado en los informes elaborados por el HLWG, se nos dijo que la evaluación de impacto de la propuesta de acuerdo comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos contenía un resumen4 de las medidas periciales obtenidas desde su creación. También se nos dirigió a la página de información general de la Comisión5 para consultas públicas. Allí nos enteramos de que más del 65% de las entradas en las dos primeras consultas sobre el proyecto de acuerdo UE-EE.UU provenían de empresas y asociaciones empresariales. Pero, ¿quiénes eran los 114 consultados? ¿Para quién están haciendo lobby ? El archivo de documentos de la Comisión ofrece sólo unas pocas contribuciones6 .
El 19 de abril, presentamos otra solicitud de información 7 para saber más acerca de los contactos de la Comisión con los grupos de presión de la industria que desean influir en el pacto comercial transatlántico. Pedimos una lista de las reuniones celebradas con estos grupos de presión, las actas y la correspondencia conexa. La Comisión respondió que esto “se refiere a un gran número de documentos” y nos pidió “limitar el alcance de la solicitud, a fin de reducir el número de documentos a una cantidad más manejable (por ejemplo, ¿querrían ustedes recibir los informes de reuniones y la correspondencia intercambiada con determinadas empresas o asociaciones?) “. El 31 de mayo, seis semanas después de nuestra petición y después de varios intercambios de correo electrónico, se nos dijo que la Comisión estaba “actualmente en las primeras etapas de evaluación de su solicitud y [...] todavía no está todavía en condiciones de dar una estimación detallada del número de documentos que podría implicar nuestra demanda”. El funcionario de la Comisión agregó: “Nuestra estimación en estos momentos es que sólo vamos a tener una primera visión general de la situación a mediados de junio, momento en que les informaremos al respecto.”
¿Qué tratan de ocultar?
Mientras seguíamos a la espera de más información sobre lo que parecen ser cientos de documentos relacionados con el gran lobby de negocios implicado en este acuerdo comercial entre la UE y Estados Unidos, tuvimos más suerte con una solicitud de acceso a la información que hicimos al representante comercial de Estados Unidos. Su oficina nos proporcionó una lista 8 de los “principales responsables y expertos por temas” en el HLWG, en la que se enumeran tres docenas de funcionarios del gobierno de EE.UU. y la Comisión Europea.
Echando un vistazo a la lista, no estamos muy seguros de qué es lo que la Comisión estaba tratando de esconder al retener esta información. Quizás el hecho preocupante de que un ente dotado de un título tan rimbombante –el famoso Grupo de trabajo de alto nivel para el empleo y el crecimiento– no sea más que un puñado de conocidos burócratas favorables al libre comercio de ambos lados del Atlántico. O quizás el hecho de que a la Comisión no parecen preocuparle los impactos laborales y ambientales del acuerdo comercial propuesto. Porque, mientras que el lado estadounidense tiene dos responsables en el apartado de “medio ambiente” y “trabajo” dentro el HLWG, la columna respectiva correspondiente a la UE está reveladoramente vacía.
La necesidad de una transparencia real
Mientras cada vez más eurodiputados y grupos de ciudadanos exigen que las inminentes negociaciones entre la UE y Estados Unidos se lleven a cabo de una manera abierta, nuestros descorazonadores intentos de obtener información básica sobre quién está detrás de la puesta en marcha de estas negociaciones demuestran que la Comisión no se preocupa por la apertura. En cambio, parece decidida a hurtar a la opinión pública cualquier tipo de información significativa sobre el acuerdo comercial más importante que se haya negociado nunca en el mundo. Si los eurodiputados se toman realmente en serio sus demandas de mayor transparencia y su deber de exigir a la Comisión su rendición de cuentas, tienen ante sí una espesa cortina de humo.
Fichero adjunto: hlwg-members.pdf
2 http://www.asktheeu.org/en/request/high_level_working_group_on_jobs#entrante-1532
3 http://ec.europa.eu/transparency/regexpert/PDF/C_2010_EN.pdf
4 http://trade.ec.europa.eu/doclib/html/150765.htm
5 http://trade.ec.europa.eu/consultations/#_tab_2012
6 http://trade.ec.europa.eu/doclib/cfm/doclib_section.cfm?sec=575
7 http://www.asktheeu.org/en/request/dg_trade_contacts_with_industry#incoming-1576
8 http://corporateeurope.org/sites/default/files/hlwg-members.pdf
Fuente: http://corporateeurope.org/blog/who-scripting-eu-us-trade-deal

miércoles, 19 de junio de 2013

El choque de trenes en Castelar El fracaso de la privatización



Otra tragedia ferroviaria con pérdidas de vidas y fuerte impacto en personas afectadas, no solo en forma directa por el choque de trenes en Castelar, sino por las complicaciones que se les presenta a los trabajadores que habitualmente utilizan ese servicio y que fuera suspendido transitoriamente. Todavía está en estudio la causa del siniestro y más allá de cuál sea la misma, no queda duda que lo que debiera discutirse es la política ferroviaria de privatizaciones inaugurada a comienzos de los 90´. Son dos décadas de desmantelamiento de los ferrocarriles, del cambio de su función como servicio público de transporte a mercancía a cotizarse en el mercado, con un Estado soporte de la ganancia empresaria.
En rigor, no solo se trata del transporte ferroviario, ya que nuestro análisis podría ser extensivo al transporte carretero o aéreo. En tiempos menemistas se modificaron valores a la hora de considerar las relaciones sociales en la producción y distribución de bienes. Desde entonces se privilegió el proceso de mercantilización de la vida cotidiana, abandonando cualquier pretensión de atender las necesidades sociales con vocación de servicio.
El Estado fundamentó y lideró el aperturismo al más apto en la competitividad del mercado.
La rebelión popular del 2001 golpeó duro en ese paradigma ideológico, pero la institucionalidad estructural no muto y así como los ferrocarriles siguieron siendo administrados por empresas privadas, el régimen privatista se mantuvo instalada, sostenido con subsidios públicos. Muy pocas empresas privatizadas fueron estatizadas, y cuando ocurrió se explicó por falencias o incumplimientos explícitos en la operatoria de la actividad, tal el caso del correo, algunas líneas ferroviarias, y el propio sistema de jubilaciones en plena crisis mundial durante el pico que afectara al mundo financiero en 2009.
Esa nueva intervención estatal ocurrió en los ferrocarriles luego del episodio trágico de la estación once a comienzos del 2012. Es lo que intentaron mostrar las autoridades como respuesta al nuevo episodio de Castelar. En realidad, dar cuenta de gastos realizados para el funcionamiento de los trenes no es lo que hace falta en estos momentos, incluso existiendo posibilidad de falla humana, algo en proceso de estudio e investigación. El asunto es si ante la eventualidad de la falencia humana existe la posibilidad de contenerlo o limitarla por vía del uso de la tecnología. La respuesta es afirmativa y por lo tanto el problema es estructural y se asienta en dos décadas de abandono de una estrategia favorable al transporte público.
No solo es válido el análisis desde los problemas y accidentes ferroviarios, sino del privilegio que en estas décadas se le ofreció al transporte automotor. Todo el modelo productivo y de desarrollo privilegió el uso del automotor, el utilitario y el camión, sea por el consumismo individualista a que convoca el proceso de mercantilización aludido, sino por los mecanismos de traslado de la producción sojera y agropecuaria desde los centros productivos a los puertos. Este privilegio al transporte privado se asentó en cuantiosas inversiones en infraestructura caminera, incluidas las concesiones para el peaje que afecta el costo de traslado en sectores de menores ingresos. El récord de la producción y venta de automotores fue en sentido contrario al deterioro recurrente de los ferrocarriles y el transporte público, solo sostenido sobre la base de unos subsidios crecientes en estos últimos años, que además, necesitan ser investigados sobre su aplicación efectiva en la infraestructura o en el servicio.
Lo primero que corresponde señalar es el fracaso en las políticas de privatizaciones para la sociedad, especialmente para los sectores de menores ingresos usuarios de ese transporte público de pasajeros. A continuación corresponde revertir la situación y modificar los valores que en la sociedad favorecieron la orientación pública para el privilegio del transporte privado. No se trata de trenes contra automotores, sino de establecer que es lo prioritario para la sociedad en cada momento. No solo por las tragedias de Once y Castelar, sino por las consecuencias sociales que supuso la mercantilización de la vida cotidiana es que sostenemos que se requiere pensar y actuar para avanzar en un proceso de des-mercantilización. Se trata de ir a contramano del sentido principal por construir un capitalismo serio o normal.
Puede parecer utópico pensar en términos de des-mercantilización. Sin embargo, cuando se piensa en los reclamos por salud o educación pública, lo que se defiende es la des-mercantilización de esas dos sensibles áreas de nuestra cotidianeidad. Lo que se dice es que la salud o la educación no deben ser mercancías, y crecientemente lo son. Basta pensar en cómo se “resuelve” en la vida cotidiana el proceso de educación y salud para afirmar su creciente peso mercantil. Ocurre lo mismo en otras áreas de la vida y la economía. Es creciente el fenómeno mercantil en áreas propias de la actividad estatal como la Justicia o la Seguridad, con tendencia a la privatización creciente.
El interrogante que suscitamos es sobre la posibilidad de la des-mercantilización de áreas estratégicas. En ese sentido, no solo la educación y la salud, la justicia y la seguridad, sino que aparecen otros temas, como los de la energía o el transporte público de pasajeros o cargas. En ese sentido, todo el esquema privatizador ingresa en la evaluación, incluido el sector financiero. Es que aún subsiste la legislación financiera de la dictadura genocida, mecanismo que facilitó la extranjerización de la economía y el ingreso de capitales para potenciar el proceso privatizador de los 90´. Ya murieron Videla y Martínez de Hoz, y Menem acaba de ser condenado por uno de sus delitos, el de la venta de armas a Croacia y Ecuador, pero la institucionalidad privatista que está en el eje central del programa de la dictadura y del menemismo sigue costando vidas al pueblo argentino. Es lo que debe revertirse para que tenga sentido la condolencia a las víctimas de los siniestros.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Manning, Assange y Snowden muestran cómo EEUU trata de eliminar la figura del héroe informante

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Recientemente ha salido a la luz pública una grave denuncia hecha por un supuesto “informante” (whistleblower) que trabajó para una contratista de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de EE.UU. Para la democracia estadounidense los informantes son personajes modernos polémicos y de relevancia, ya que más de una vez han señalado graves actos de corrupción del gobierno. Así , en 1971 Daniel Ellsberg filtró a la prensa Los Papeles del Pentágono, una obra que demostraba como la administraciones de L. B. Johnson y R. Nixon habían mentido reiteradamente para engañar a la opinión pública de su país y la del mundo, sobre el verdadero progreso de la guerra de Vietnam. Para el ciudadano estadounidense bien informado y relativamente bien preparado, que lamentablemente no es la mayoría, esa fue una señal evidente de que la guerra era un gran engaño. Pero el ciudadano promedio de los Estados Unidos de América está más pendiente del Super Tazón o de la serie mundial de béisbol, e ingenuamente cree en lo que la televisión le dice. No fue hasta que la televisión de la época le empezó a mostrar que lo que proclamaba el gobierno no era cierto, que la población se dividió ante mantener la guerra. Y para ello hay que señalar que los noticieros y reportajes empezaron a mostrar las delicadas protestas estudiantiles en las universidades contra la guerra, cosa que notaron en el pentágono y hoy en día a través de sutiles mecanismos no permiten exponer. En 1972, William Mark Felt, quien por décadas ocultó su nombre y recibió el apodo de “garganta profunda”, le filtró información clasificada al Washington Post que cimentó el escándalo de Watergate y que culminó en la expulsión de Richard Nixon de la presidencia de EEUU. Nuevamente, aunque todo ello sucedió ante los ojos de los estadounidenses, no fue la mayoría de ellos los que entendían el intrincado escándalo y las implicaciones sociales de las violaciones de las leyes en esa nación. Fue más bien, el acuerdo general de las reales cúpulas del poder en Washington para cobrarle a Nixon la inminente derrota en Vietnam y la necesidad urgente de cerrar un escándalo que amenazaba con crecer y mostrar los verdaderos manejos que dirigen la nación estadounidense, lo que facilitó la salida de Nixon a patadas de la Casa Blanca.
En el 2010 Julian Assange empleando la plataforma Wikileaks en la Internet, divulgó el contenido de numerosos cables diplomáticos que había filtrado el analista militar Bradley Manning y mostraban innumerables mentiras y violaciones a las leyes, de parte del gobierno estadounidense bajo la falsa excusa de estar en guerra contra el terrorismo. La gravedad de las faltas denunciadas hacen ver a los escándalos previos como acciones infantiles, pero sin embargo no cayó ningún emblema del poder de la casa blanca, ni hubo una seria rectificación en las políticas presidenciales. Por el contrario, el gobierno de EE.UU. ha perseguido y hostigado a Assange, quien está por cumplir un año asilado en la embajada de Ecuador que está en Inglaterra, y está por condenar con graves cargos, en sus tribunales, a Manning.
Hace pocos días, Edward Snowden, quien trabajó para una contratista que sirve de apoyo tecnológico para la NSA y aparentemente ha tenido estrechos vínculos con la CIA, hizo una grave denuncia. Señaló que el gobierno de los EEUU espía indebidamente diversas formas de comunicación de cualquier ciudadano. Mencionó proyectos de envergadura para ello como “Prisma”, y especificó que para lograr tal cometido se trastocaba sistemas e infraestructura de empresas privadas de telefonía y comunicación en la red de redes. En las últimas horas añadió que este espionaje se ha hecho en conjunto con agencias de inteligencia británicas y que han espiado hasta a primeros mandatarios del mundo en cumbres diplomáticas y de negociaciones. Hasta ahora, la respuesta de Obama fue explicar con eufemismos y términos, que el ciudadano común difícilmente puede comprender, que solamente se espían los “metadatos” pero no los contenidos de las comunicaciones. Agregó que el cruce de esos metadatos puede conducir a descubrir terroristas y que hay que aceptar que como las técnicas no son infalibles de seguro ocurrirán equivocaciones. Además de ello planteó que la sociedad moderna debe comprender que para obtener seguridad debe sacrificar privacidad. Es decir, contradijo claramente el discurso con el cual llegó a la presidencia por primera vez y que criticaba a su antecesor, George W. Bush, por degradar las libertades y derechos civiles bajo la falsa idea de proteger a la nación. Por si quedara duda alguna de la respuesta de esa administración, casi de inmediato el FBI comunicó que perseguirá a Snowden.
El congreso de EEUU inició una tímida consulta a los directores de las agencias de inteligencia involucradas que no llegó a nada serio, y en dónde se repitió sin pruebas reales, el estribillo que gracias a ese espionaje se han evitado numerosos ataques terroristas. Por su parte, la reacción de la población mundial nuevamente ha sido débil. Esto produjo un aumento en la ventas de la obra “1984” de George Orwell en un 700%, que describe una sociedad con un gran hermano que espía a todos y controla sus vidas en modo totalitario. Pero, hasta ahora, no hay ninguna iniciativa cierta que ponga en jaque al poder que está promoviendo la espeluznante y falsa idea de que para estar seguro debemos renunciar a nuestra privacidad en la vida. Que debemos aceptar como obligatorias las tácticas propias de los estados policiales y lo más grave aún, que es el gobierno estadounidense el propietario de tales datos.
Lo grave de todo esto, no es que mentes enfermas por el poder elaboren proyectos que parecen tener como inspiración la serie de TV “Persona de Interés”, ya que resulta posible comprender que frente a algún tipo de poder que por largo tiempo se mantenga, será natural que surja algún tipo de corrupción. Lo deprimente es que la sociedad esté tan aterrada, o dominada por un egoísmo mayúsculo para mantener sus comodidades mundanas, como para que no reaccione cuando le dicen tamañas mentiras. Lo que decepciona hoy en día es que, a pesar de las delicadas experiencias pasadas, los informantes, individuos que en general trabajaron en relevantes puestos dentro del gobierno estadounidense; actuando por creencias de valores y razones morales, señalan a ese mismo gobierno como corruptos o delincuentes. Sin embargo, al final es el gobierno denunciado quien los juzga y determina si es válido su señalamiento.
En cuanto a las absurdas respuestas de Obama, hay que señalar que los “metadatos” son un concepto técnico ambiguo que puede ser resumido como “datos acerca de otros datos” y deja abiertas interpretaciones de cuanto refiere a los contenidos. Por otra parte, el cruce de Metadatos puede conducir a reconocer, comprender o identificar datos, pero cuando Obama dice que cruzar metadatos conduce a identificar terroristas habría que preguntarse: si ningún humano puede establecer por adelantado quién es terrorista o no lo es ¿podrá hacerlo algún programa de computación? ¿Es más inteligente un software que un humano? Como actualmente eso no es cierto, únicamente puede ser reconocido si se dispone de alguna declaración o mensaje donde se exprese que existe el propósito o la información de que se va a cometer un acto terrorista. Y para ello, hay que conocer el contenido de los datos.
A esto hay que agregarle, que suponiendo que los metadatos de toda la gente, estuvieran únicamente en manos del gobierno de EEUU, habría que preguntarse ¿que evitará que se filtren y lleguen a manos indebidas? ¿puede el mismo gobierno de EEUU que no pudo proteger sus cables diplomáticos, hacerlo con los metadatos? Y si existen contratistas que manipulan tales metadatos, como la empresa para la que trabajaba Snowden, ¿no están estos ya en manos de terceros que generalmente son de carácter privado? Si se ha espiado a los primer ministros y altos representantes mundiales ¿fue ello para combatir a terroristas? ¿quién está a salvo? A ninguna de estas consideraciones importantes se refirió Obama, ni ningún periodista le preguntó.
La última pérfida idea que queda pendiente de ser refutada es la de que para proteger a alguien hay que espiarlo. La misma se le puede refutar apelando a uno de los fundadores de la patria estadounidense, Benjamin Franklin: “Aquellos que cederían la libertad esencial para adquirir una pequeña seguridad temporal, no merecen ni libertad ni seguridad.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.